Hoy en día los productos LED son muy demandados y no es de extrañar. La tecnología LED es una de las mejores tecnologías del mercado debido al gran ahorro que supone, a que no contiene gases tóxicos y a su larga durabilidad. A todo esto, se suma el beneficio que supone para el medio ambiente reduciendo la emisión de CO2 a la atmósfera.
Aunque hace unos años esta tecnología era muy costosa y complicada de instalar, en la actualidad los precios del LED han sufrido un descenso muy relevante. Además, la instalación se ha convertido en algo tan sencillo como quitar la vieja bombilla y reemplazarla por la nueva.
Según expertos, el precio de los productos LED decayó entre un 63% y un 80%, dependiendo del tipo de articulo. El producto que ha sufrido en el precio un mayor descenso son las bombillas LED, el cual está cada vez más cerca de las bombillas tradicionales.
Si antes una bombilla LED de Philips te costaba unos 15 euros, hoy en día puedes conseguir una LED mucho mejor que las primeras y del mismo fabricante, por tan solo 5 euros. Teniendo en cuenta que las bombillas de bajo consumo consumen más, no duran tanto y contienen elementos peligrosos para nuestra salud como Mercurio, la tecnología LED a ese precio es casi un chollo.
En el futuro, sin embargo, se prevé que la iluminación tradicional acabe cayendo en el completo desuso y la tecnología LED iguale los precios de estas bombillas halógenas e incandescentes. Pero hasta entonces, aún queda mucho por lo que como consumidor si te estás planteando comprar una bombilla de bajo consumo no deberías privarte de obtener un ahorro mayor, un producto que te durará más tiempo y sobretodo, un producto que –en caso de rotura accidental- no pone en riesgo tu salud, la de los tuyos y la de nuestro querido planeta.
